La vida misma

Supe la noticia y comencé a correr, no era el único ni el más rápido. Algunos miraban escépticos, otros trotaban para acercarse hasta el punto de lo irreversible; si cruzabas la línea no habia vuelta atrás. Yo estaba decidido pero estaba jodidamente lejos, entre el pánico y la algarabía de pronto todo se volvió un caos; veia con horror como quienes traspasaban gritaban de alegría, el tiempo se agotaba y  al cerrarse la frontera noté que fui el único que quiso cruzar y no pudo; quienes cruzaron desaparecieron mientras su cara se transfiguraba en dolor y tristeza. Ahora estoy solo y soy único.

Autor: Pascal

El Conejito

Nací un 01 Septiembre del 2010, fui el menor de 5 hermanos (de la misma camada)……, aquella fría mañana ya había cumplido 2 meses desde mi nacimiento..., así que junto con mis padres y hermanitos...  decidieron que ya estaba lo suficientemente fuerte como para salir a conocer nuestro hermoso jardín y aquellas raras maquinas de fierro de colores azules y rojos que habitan nuestro territorio..., pero que nos sirven de escondite.., sobre todo cuando llevan demasiado tiempo en el mismo lugar…….., caminando por el verde prado.., con lo primero que me encuentro son a curiosos hombres que están dentro de un contenedor estos señores.., están escuchando una música muy divertida... creo que le llaman cumbia (Américo a morir)…, por ahí una que otra mirada a nosotros..  como si ellos ignoraran nuestra presencia..., pero por lo que me dicen mis papas..., este lugar es muy seguro ya que estos hombres nunca nos han atacado y tampoco molestado….., sigo en ruta y paso por el frente de un lugar que le llaman casino..., hay mucha gente compartiendo un delicioso y sabroso plato………., dando la vuelta por el casino..., me encuentro a un grupo divertido de hombres... golpeando con sus pies una esfera, a la cual le llaman pelota….., se ven muy entretenidos.., ya que nadie se da un minuto en mirarnos.., parece que el juego consiste en golpear la pelota y que esta nunca entre al arco.., porque nadie le achunta….., este lugar donde vivo me encanto.., espero poder seguir creciendo y con la seguridad que en esta casa siempre estaremos muy seguro de los peligros que existen al otro lado de las rejas y paredes que nos rodean

Autor: Franck Vodoloski 

Sueño


La noche comienza a caer y todos ya comienzan a encerrarse en sus hogares  junto a sus hijos, parejas  o simplemente junto a su mascota, y yo aquí solo en este pequeño asiento de plaza, parezco ser invisible, pues nadie nota mi presencia, poco a poco ya todo se torna desolado  y yo aquí, sin siquiera algo que comer.
Pienso y pienso, que ha sido mi vida, y no tengo respuesta, pues nada ha sido, estoy aquí solo.
Lo mejor será acomodar este viejo y sucio bolso…y dormir para esperar el mañana, quizás al despertar todo cambie y este  sea solo un maldito sueño.

Autor: Caro

Cambió mi vida


Como cada tarde de primavera, solía salir a caminar, solo para calmar esta gran soledad, con mi libro en las manos creía tener la mejor compañía, hasta que de pronto algo ha cambiado, sin darme cuenta, al regresar a mi casa, alguien me seguía, no eran simples pasos, sino varios de ellos……
Desde ese momento, ya mi vida ha tomado otro rumbo, tengo de quien preocuparme  y  alguien que al llegar a casa me recibe con el mejor de los cariños  y ella solo pide que le de todo mi amor.
Con todo cariño para mi cachorra Luly.

Autor: Caro

De madrugada

De vuelta a casa, bajo la lluvia recordé que hace un rato atrás dije te quiero, nunca había mencionado tal frase. Tuve miedo, temblaron mis venas, se quedó en altura mi confusión. Consulté un diccionario, también de antónimos. Nunca dije te quiero, ni siquiera a la mascota y en el principio del horizonte habían señas de un saludo caluroso con un par de ojos, pintando latidos y otros sembrando crecimiento. ¿De dónde viene? Ni el espejo lo sabe. Al volver a decir te quiero con la voz amante, el pecho se quedó tranquilo y la madrugada de aquel invierno fue pintada con dedicación y hubo remedio al eco poderoso de la duda. Apago la luz de la mesita fielmente nocturna y compañera, miro por la ventana. Ahora tengo tu amor, amor.

Autor: El gato con botas

Silencio


Le gustaba llegar sin que lo llamáramos, pensamos que era por timidez. Sin embargo, el sabia que lo necesitábamos y que era sin lugar a dudas el mejor amigo de nuestro entendimiento y comprensión en charlas y reuniones varias. Por eso cuando llego supimos que no podíamos decir su nombre, porque al nombrar lo evitábamos, porque si decíamos su nombre dejaba de existir…

Autor: Comodoro

Trébol de corazón

Lucia,  salió de casa un poco abrumada y sintiendo una gran soledad que  invadía su pecho.  Su marido,  hombre tierno y  respetuosos pero su  trabajo ocupaba todo su tiempo…..su rutina,  salir temprano en la mañana  y llegar tarde por la noche. Todos los días eran  iguales incluso ocupaba algunos Sábados al mes.  Ese día Lucia ponía especial atención a todo lo que la rodeaba,  tal vez por el mismo hecho de sentirse de manera tan especial.

Mientras caminaba una suave brisa primaveral levantaba un poco de tierra, hojas etc. Se cubrió los ojos y se dio cuenta que llevaba  entre sus dedos un poco de pasto y  un trébol de cuatro hojas. 

Sonrió y pensó me dará  buena suerte. Lo guardó en el  bolsillo de su blusa y siguió caminando,  no se dio  cuenta pero llegó al mall que no quedaba muy lejos de su casa  esta  era época de navidad aprovecho de recorrer las vitrinas  tan bien adornadas. La gente se paseaba  por todas partes, iban y venían.
  
La caminata la hizo sentarse un momento respiro profundo y  recordó a sus amigas.
Lucia tenía pocas pero buenas amigas, esas amigas incondicionales, leales y fieles, incluso después de dejar de verse por algún  tiempo, siempre se daba la  ocasión en que pudieran hablar o tener el tiempo de tomar   el típico cafecito y ponerse al corriente de todo los acontecimientos, algo así como un (sex and the city) Santiaguino.
Necesito a alguien que me quiera de corazón que esté aquí compartiendo un ratito conmigo pensó.
 La Paula…. No,  ella está en  Antofagasta, esta muy lejos…… La Joanny……, no,  ella no puede más con sus dos niños y su marido.
Mi querida Fanny….., no, no creo que en estos momentos pueda venir.   ¡Ya no queda nadie más!

Dio un suspiro y siguió su caminata, de pronto noto que el pasillo que estaba lleno de gente por todas partes, quedara casi completamente  vacío  lo que  permitió que Lucia tuviera una visibilidad de todo el largo de este,  solo había una mujer al fondo muy concentra  mirando una  vitrina en particular,  Lucia caminando se iba acercando a ella y de dio cuenta  que la tienda se llamaba el trébol,  y que justamente la persona que estaba tan atenta  a la vitrina era su querida y mejor el amiga de el colegio y liceo, ellas eran uña y mugre y no la veía hace años.

Lucia con temor de que ella se desvaneciera en el aire tal cual apareció se acerco rápidamente y sin emitir ninguna palabra la miro con una sonrisa que no cabía en  su rostro,  ella levanto la mirada, extrañada,  cuando la reconoció abrió sus brazos y la abrazo con tanta fuerza que Lucia  casi quedo sin aliento y le dijo Luciiiaaaa.  Amiga.
Veróoonica. 
Esto es un regalo. Recordó su trébol.

Autor: La pantera rosa

Una Fotografía

Sus seres queridos y  el  paisaje  plasmados en aquella Fotografía se habían convertido en su  tabla de salvación para  ausentarse por un instante de su infinita tristeza.
Si bien había días en que los alimentos y el abrigo eran  escasos y la compañía de otras personas era breve y esquiva,  al contemplar esa Fotografía lograba  que sus desgastados pensamientos y  sentidos  viajaran  en el tiempo  y le permitieran revivir con una intensidad cercana a la realidad… las risas, las voces, los aromas, los sabores, los ruidos y  los colores  de aquel momento mágico de  unión, juegos, complicidades y alegrías.
Cada gesto,  cada sonrisa, cada mirada  de cada integrante de su amada Familia retratados en esa Fotografía se convirtieron en su más preciado tesoro.

Un tesoro  que rescató  en el momento preciso en que su mundo, su vida, en un tiempo fugaz pleno de felicidad, se desintegró  y que sólo logró dejar eternamente intacto  en aquella Fotografía.

Autor: Cecil

Estoy como lechuga


5:50 AM, quinto electroshock, el sudor frío comienza inexorablemente a ser parte de todos, el líder del equipo médico, con años en el servicio de urgencia, con  una esperanza contradictoria con la situación, mira atentamente el monitor...nada, la línea de la vida, sigue recta, absoluta, como el silencio que invade a todos. Alex en la camilla, derrotado sin poder moverse, sabe todo lo que esta pasando y no entiende como pudo llegar a ese punto, entonces entiende que no vale la pena preguntárselo, un flash dispara miles de momentos de su vida en un solo instante, pide a Dios perdón y paradójicamente daría su vida por una nueva vida, sexto electroshock y final, el doctor a viva voz indica los datos del fatídico parte: 6:29 AM; causa: insuficiencia cardiaca aguda. Un minuto después, Alex, escucha el más molesto de los ruidos 06:30 AM, ya es tarde, debe llegar llevar los niños al colegio y luego  al trabajo.

Autor: Mr. Tesla

La mosca fantasma, Fido dido y los marcianos


Estaba mirando a Fido-Dido corriendo en una hoja de papel, sólo puede correr en un sentido, hacia  adelante, es como si yo quisiera retroceder el tiempo, no puede doblar pues sólo conoce de largos y altos, para él nada tiene ancho ya que vive en 2 dimensiones. De repente, de la nada, se aparece un fantasma, algo muy extraño, nunca antes visto, está aterrado y la reacción natural es atacarlo o arrancar, yo desde mi escritorio lo observo y me sonrío; es solo una mosca que aterrizó en su mundo, en su plano, cuando estaba en eso, ocurrió algo muy raro que desvió mi atención: una luz en el cielo, pensarán que estoy loco, pero creo que era un OVNI y apuesto que no me creerán, pero estoy casi seguro que los marcianos eran igual a nosotros pero como venidos de otro tiempo.

Autor: Pepea